viernes, 28 de abril de 2017

ATARDECE

Quédate con nosotros porque atardece…
(Lc. 24, 13-35)



Se nos hace ya tarde. Y anochece en nuestro Emaús.
¡Noche fatigosa la de nuestra fe, Señor!
El escándalo de tu cruz
ha trastocado nuestras ilusiones
y el desencanto se apodera de nuestras esperanzas.

Nuestros  pies no soportan la larga caminata de la vida,
nuestras dudas y temores se hacen eternos,
Solos, no somos más que torpes discípulos de un crucificado.
Y no alcanzamos a entender
el valor revolucionario de tu testimonio.
De ahí nuestras inquietudes y amargas desilusiones.

Sí, hemos tomado el camino equivocado
al atrincherarnos en el aislamiento de nuestros  rezos,
en el abandono de la comunidad,
en la huida de toda búsqueda,  en el olvido de tu palabra…
¡Qué torpeza la nuestra!

Gracias que en Emaús, Señor,
nos has despejado el camino…

Cuando se haga tarde y anochezca en nuestro corazón,
la escucha comunitaria de tu palabra
y el amor compartido en la fracción del pan
realizarán la experiencia de tu encuentro resucitador.
Entonces se abrirán nuestros ojos para reconocerte.


lunes, 24 de abril de 2017

SONETO A LOS 80

MARÍA

Un sol guiñaba cariño a la luna:
Juan de Dios que desposaba a María.
Volcando vida en sus hijos quería
ser timonel de estrellas con fortuna.

Mas el sol sin esperar, en la bruna
noche se durmió dejando a María,
derramada en su propia sombría,
fiel arriera y audaz  como ninguna.

Sensible y con  bravura hizo camino
en duros inviernos y en los estíos.
Puerta abierta  fue siempre su destino.

Con alegrías y penas sus bríos
enlazan con el cielo más divino.
Hoy octogenaria ama con delirio. 

sábado, 22 de abril de 2017

EN MEDIO

… entrando, cerradas las puertas,  se puso en medio.
(Jn. 20, 19-31)

En medio del infinito hostil,
nosotros aterrados a causa del  hambre, del paro
del sida y la droga,
de los odios fratricidas que ejecutan a millones de  hermanos,
sentimos un inmenso vacío sin Ti.
Y somos puertas cerradas,
por miedo a complicarnos la vida.

Somos seres errantes, timoratos,
incrédulos a pesar de nuestros rezos,
tras siglos y siglos sin darnos cuenta
de tu maravilloso proyecto de humanidad nueva.

Plántate, Señor, en  medio,
muéstranos de nuevo tus llagas,
las tuyas,
y las de nuestros hermanos, los crucificados contigo
a través toda la historia…
A ver si, por fin, te reconocemos,
en tu aventura salvadora.

Tú, Jesús, no eres un recuerdo del pasado,
ni tu presencia es un tú en mi yo,
separado del nosotros.
Sí, visto lo de Tomás,
palpamos que no hay experiencia pascual,
si no te muestras en medio de nuestra comunidad.

Necesitamos (¡somos humanos!)
hurgar tus heridas drenadas  y victoriosas,
para sentir la plenitud de vida nueva,
resucitada,
que emana paz, alegría, confianza.
Para gozar el destierro de todos los miedos,
de todas las tristezas, de todos los agobios…

Que tu Espíritu sople sobre nosotros,
reunidos en Iglesia,
para que la fuerza de su vendaval
abra nuestras puertas y
nos haga gritar a los cuatro vientos
con rigor profético:
            ¡Señor nuestro y Dios nuestro!

domingo, 16 de abril de 2017

FELIZ PASCUA, AMIGOS

El sepulcro vacío... porque fue solidario hasta la muerte
No hay Pascua,  
si ignoramos la mafia en las pateras
y los muertos en los mares.
No hay Pascua,
si marginamos a los presos ,
a los parados, a los sin techos.
No hay Pascua,
si damos oídos al dinero,
al poder, al falso político.
Ni hay Pascua
si no gritamos contra la metralla del asesino,
y si no alimentamos la sonrisa del niño,
y no destruimos los calvarios humanos… 

Sólo el amor
es el motor de la Pascua del Crucificado.


sábado, 15 de abril de 2017

SE AHORCÓ

… y fue y se ahorcó.
(Mt. 26, 14-27.66)


Hermano Judas,
tasada por treinta monedas tu traición,
fuiste vapuleado historia tras historia…

Al verte colgado en tu propia cruz,
siento repeluzno
por cuantos han pisoteado tu flaqueza
con el morbo de sus palabras,
y sin reparar en su viga.

Desata el nudo de tu cerviz, amigo,
no te ahorques más,
que has hallado gracia
entre la milicia de ovejas descarriadas,
publicanos, prostitutas…

El Nazareno pagó tu vil gesta
con su sangre inmolada.
Bájate, pues, del árbol,
Judas hermano.
Y corea a los cuatro vientos,
que el perdón del Calvario
sigue regando nuestras eras.

Canta, sí,
que el amor del Crucificado
arrolla la crueldad
de cualquier beso traidor…

jueves, 13 de abril de 2017

LA HORA

Sabiendo Jesús que había llegado la hora…
 (Jn, 13,1-15)
  
I

Suena la hora.
El novio
ha salido a nuestro encuentro.
Se ha hecho servidor
a los pies de los amados,
ceñido con el atuendo de esclavo
y la jofaina en la mano.
Sólido signo de su ruta nazarena,
síntesis de la razón de su vida.

II

Suena la hora.
La hora de amar. Bálsamo infalible
de vida.
Y nos deja su testamento
donde  uva y  trigo
construye fraternidad.

Es la Cena del Señor,
memorial a celebrar en la mesa globalizada
de todos los tiempos
hasta la consumación de todos los horizontes,
sentados  todos negros y blancos y amarillos,
y ricos y mendigos.

III

Y suena la hora tras la Cena.
Terrible, inhumana hora.
Hora entre olivos y nocturnidad,
entre abandono y traición.
La hora del beso robado...
La hora de Getsemaní, lamento de un Amigo,
angustia  de un Maestro,
fidelidad de un Cristo que arruina su corazón
para levantar a los hermanos.

¡Ha sonado la hora de la nueva Alianza,
complicidad  de amor, dolor y remanso,
a la espera de ver florecer el leño verde!

sábado, 8 de abril de 2017

MIRA A TU REY

Mira a tu rey que viene a ti.
(Mt., 21,1-11)



Palmas y vítores
en día de Ramos,
no impidáis escuchar el silencio
de tanto sufrimiento injusto
tras el telón seductor de este mundo.

Palmas y vítores
al paso de la borriquilla prestada,
habladme de la aventura de amor del Nazareno,
teñida de humildad y sufrimiento,
tras el telón de su obediencia al Padre.

Palmas y vítores
ante el Rey que no es de este mundo,
haced que los aplausos y las alfombras del camino
no nos impidan soñar ilusiones de vida eterna
tras el telón resplandeciente 
de la nueva historia que se escribe con su cruz.

sábado, 1 de abril de 2017

LÁGRIMAS DE VIDA

 Jesús se echó a llorar
(Jn. 11, 1-45)


Jesús, vas camino de Betania,
junto a la Jerusalén de tu próxima pasión.
La muerte de Lázaro, presagiando tu suerte,
ha creado el encuentro. Y no la rehúyes,
como a un escollo sobre el camino.

Vas al encuentro de la muerte de tu amigo…

Entiendo que la muerte es la sombra común de los mortales,
 es el escándalo humano imposible de esquivar,
es la licencia de las lágrimas.

Por eso, ante el amigo muerto,
lloras,
        lloras,
                lloras,
haciendo de tus lágrimas el señorío de la vida
y de la muerte, para gloria de Dios.

 * * *

Vas camino de Betania, al encuentro de la muerte
que será vencida en el amigo.
Yo soy también Lázaro,
en el camino de otra Betania.

A la vista de la ternura de tus lágrimas,
dame la suerte
de cerrar mis ojos, soñando asomarme a tu vida.

Que tus lágrimas por el amigo me bañen entero,
definitivamente,
para llegar a reunirme contigo 
en la vida que no tiene fin.